Los Servicios de Radio y Televisión (SRT) de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) están conformados por el Canal 10 de televisión, la AM LW1580, la 102.3, el Canal U y el sitio web de noticias Cba24N, que por ahora han quedado al margen de la privatización tras la caída de la Ley Ómnibus pero no está claro que se asegure su financiación.
Compartimos el siguiente artículo de Miguel Aponte -Secretario Adjunto del Círculo Sindical de la Prensa y la Comunicación de Córdoba (Cispren)- en el que se describe el estado de situación y se analizan las posibilidades hacia adelante:
El ajuste que se verifica en todos los terrenos del Estado acelera la discusión sobre el rol de los medios públicos. En el caso de la empresa de la Universidad Nacional de Córdoba, el debate, siempre soslayado, parece precipitarse. Los trabajadores, organizados en la intersindical, se muestran dispuestos a sumar propuestas. Pero, hasta ahora no hay precisiones. Queda claro que ni la Universidad ni el actual directorio cuentan con un proyecto.
Hace dos semanas, el tema de los Servicios de Radio y Televisión (SRT) de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) fue tratado por el Consejo Superior de la Casa de Trejo. Su privatización, y la de otras 40 empresas del Estado, estaba incluida en la fallida “Ley de bases y puntos de partida para la libertad de los argentinos” (Ley Ómnibus) del gobierno de Javier Milei. Si bien el proyecto no pudo superar su instancia en la Cámara de Diputados, de guiarnos por la aceleración de medidas de recorte del gasto público, y el aún vigente Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) N° 70/23, se cierne sobre el multimedio universitario una amenaza que, si bien no es seguro que concluya con su enajenación, sí puede afectar su financiamiento.
Una jornada caliente en el Consejo Superior
El pasado martes 27 de febrero, el Consejo Superior de la UNC trató el tema, sobre la base de la “hoja de ruta”, muy escueta, presentada por las autoridades universitarias. A grandes trazos, incluye el adelanto de jubilaciones del personal, retiros voluntarios y pase a comisión hacia otras dependencias de la UNC de trabajadores, una propuesta limitada al ajuste.
Seguida la sesión de cerca por un numeroso grupo de trabajadores, con el apoyo de la intersindical que conforman el Cispren, Satsaid, AATRAC y Locutores, durante encuentros previos a la votación el propio rector Jhon Boretto planteó una cuestión administrativa, formal: “Si no se aprueba el proyecto, no hay recursos para pagar”.
Esto fue así, en tanto dentro de lo que se trataba, estaba la reconducción del presupuesto del año pasado, insoslayable a la hora de garantizar la disponibilidad de recursos y afrontar, ni más ni menos, el pago de los salarios.
Los delegados de los trabajadores y trabajadoras aceptaron que se aborde la cuestión, recibiendo a cambio el compromiso –después votado en la sesión- de que “se priorizará la conformación de una comisión para definir el proyecto futuro”.
Las expectativas ahora se centran en esta comisión que, con la participación de los trabajadores del multimedio, deberá llevar adelante una revisión integral de lo hecho hasta aquí y ofrecer una propuesta de sustentabilidad de la empresa.
En el medio prima por estos días el debate y la preocupación de sus trabajadores por el futuro. Aparecen, desde cuestionamientos a las distintas gestiones en el multimedio, hasta las indefiniciones de parte de la propia Universidad sobre qué hacer con los SRT.
Se arriesgan conclusiones, en cuanto si el debate planteado abonó las intenciones que ya tenían las autoridades universitarias, o un grupo de consejeros, de desprenderse de la empresa.
Todo en medio de políticas nacionales de achicamiento y desguace de empresas públicas, donde uno de los blancos son las comunicaciones y la cultura.
“No sobra nadie”
Desde los trabajadores y las trabajadoras, más allá de la angustia que les genera que la tan mentada “motosierra” avance sobre los SRT, se alcanzó una coordinación entre los distintos sindicatos que los representan, y que genera expectativas en que se encuentre una salida que permita, en adelante, garantizar la sustentabilidad.
En un documento, tras la reunión del Consejo Superior, la Asamblea de los SRT destacó que si bien no se logró frenar la votación del plan que implica un ajuste, “logramos que se modifique el artículo 2 de la resolución para que se incluya la participación de las y los trabajadores en las comisiones que definan el plan de la empresa”.
Y también reconocieron “errores” en la conducción de la empresa y que es fundamental corregir y cambiar, para que los SRT sean un medio sustentable.
“Hemos ganado en experiencia de organización y continuaremos en ese camino exigiendo que se cumpla con el compromiso de darnos participación en la definición de los destinos de la empresa con el objetivo de defenderla y dar nuestro aporte”.
Por lo pronto, reclamaron por la continuidad de aquellos contratos que vencen el 31 de marzo y sobre los cuales las autoridades no garantizaron la renovación. “En los SRT no sobra nadie”, concluyeron.
Hacer de los SRT una empresa sustentable
Previo a comenzar a deliberar el Consejo Superior, el periodista Dante Leguizamón leyó ante los consejeros un documento, surgido de la Asamblea de Trabajadores.
“Detrás del pedido de reconducción del presupuesto 2023, sin tener en cuenta las consecuencias de la devaluación de diciembre pasado y el golpe inflacionario de los últimos seis meses, se vislumbra un desprecio a la Universidad y a la educación pública”, dijo Dante, dándole un marco político al tema que se discute.
En otro momento sostuvo: “A las autoridades universitarias, y a la comunidad en general venimos a decirles que estamos dispuestos a luchar juntos con el objetivo de proteger los principios más valiosos de los más de 400 años de historia que han hecho de la Universidad Nacional de Córdoba un ejemplo de saberes, lucha y dignidad”.
Tras la sesión, Leguizamón le dijo a La Nueva Mañana: “Lo que hicimos hoy fue plantarnos y decir ante los consiliarios que no nos sobra nadie y que no puede ser que se haga un plan sin haber consultado con ninguno de los trabajadores y trabajadoras afiliados a los gremios”.
“Las autoridades escucharon de primera mano lo que las y los trabajadores teníamos para decir, se tomaron algunos de nuestros argumentos. Si bien no fueron suficientes para que no se votara, surgió el compromiso de convocarnos a formar parte de una mesa para planificar justamente esta refuncionalización de los SRT”, agregó Francisco Fleytes, delegado del sindicato de televisión SATSAID.
Fleytes asocia el tema SRT a la crisis general que están viviendo todas las universidades, que padecen un desfinanciamiento a partir del congelamiento presupuestario. “En lugar de administrar la miseria debemos sumarnos al resto de las universidades para exigir que se les brinde el presupuesto necesario, y en ese marco discutamos, por supuesto, cómo hacemos para refuncionalizar los SRT, hacerla una empresa sustentable”, dijo el dirigente a LNM.
Un proyecto integral
Los trabajadores, organizados en la intersindical, se muestran dispuestos a sumar propuestas. Pero, como le dijeron a LNM, tras la sesión del Consejo son conscientes de que avanza el plan de recorte.
“Es un ajuste clásico, reduciendo la planta para bajar el déficit. Y se está haciendo sin tener una hoja de ruta, sin un plan comunicacional, sin prever requerimientos técnicos. Nos queda organizarnos para participar de esa mesa, y centralmente con la urgencia de garantizar los puestos de trabajo, hay contratos próximos a vencer y nos dicen que los salarios están garantizados hasta junio, vamos a pelear para que los SRT sigan existiendo, para que mejoren y para que se sostenga la fuente de trabajo, respetando nuestros derechos y garantías”, agregó Fleytes.
“Tenemos ese gran desafío: en lugar de construir un parche que se caiga al poco tiempo y que, en el mejor de los casos, en un año estemos discutiendo cómo se redujo la planta, pero los problemas estructurales siguen, necesitamos construir un plan concreto, con participación de la Universidad, de los medios, de los trabajadores”, amplió el delegado de SATSAID.
La muy activa Asamblea de Trabajadores reivindica la función social de los SRT. “La discusión no puede quedar circunscripta a nuestro ámbito, sino que tiene que estar abierta a toda la sociedad, y eso es lo que enriquecerá el plan para la empresa”.
El financiamiento
No se conocen números precisos, pero se sabe que el presupuesto de los SRT está cubierto mayormente por recursos propios de la UNC. Ahora, esos recursos no aparecen en el inciso 1 de su presupuesto, que es el que garantiza los salarios del conjunto de los trabajadores de la universidad; ni en el inciso 2, que es el de los gastos operativos.
Los trabajadores insisten en que se trata de un error, de manera de que los SRT estén en paridad con las otras dependencias universitarias.
“Es un problema a subsanar, para estar incluidos en el inciso 1, y que se garanticen los salarios de todos los trabajadores, al igual que se hace con las otras dependencias de la universidad”, explicó a LNM Marcos Pedrosa, trabajador del medio y de activa participación en la multisectorial en representación del Cispren.
Los Servicios de Radio y Televisión no aparecen en la estructura presupuestaria como, por ejemplo, el Hospital de Clínicas o Hemoderivados.
El tema del financiamiento es clave y se sabe que además de los recursos propios de la UNC hay otros aportes provenientes de la Nación. El replantear la inserción en el presupuesto es imperioso para los trabajadores, porque habilita a interpretaciones equivocadas.
“Hemos refutado las comparaciones odiosas, como que los SRT son más caros que el Clínicas, que aparece con un presupuesto más bajo. ¡Pero se consideran sólo los gastos operativos, no están sumados los salarios!”, señala Pedrosa.
“En la UNC, los salarios de los trabajadores, los docentes, de todos, entran por el inciso 1 de los trabajadores del Estado. Entonces, sumados los salarios y los gastos operativos (algo que intencionalmente o no muchos no lo hacen), el presupuesto del Hospital de Clínicas es mayor que el de los SRT”, agregó Pedrosa.
“Hoja de Ruta” de una carilla: el ajuste
Los trabajadores mencionan la “Hoja de Ruta” que presentó el oficialismo de la UNC, seguramente en base a lineamientos del propio Directorio de los SRT, hoy presidido por Manuel San Pedro.
Le objetan que apenas se trata de una síntesis, títulos que se ciñen al recorte y el ajuste de la empresa. Contempla puntos como jubilación anticipada (que involucraría a alrededor de 30 empleados), retiros voluntarios, pase a comisión y un probable procedimiento preventivo de crisis.
No hay precisiones sobre con cuánto personal los SRT serían sustentables. Y queda claro que, oficialmente, ni la Universidad ni el actual directorio cuentan con un proyecto.
Las expectativas están en que, con la renovación de sillas en el directorio, se abra la discusión con los trabajadores y así poder avanzar en un plan para el multimedio que lo haga sustentable en el tiempo.
“Queremos que los compañeros que acepten acogerse a los retiros voluntarios y demás sean libres de hacerlo. Pero queremos sentarnos a dialogar, porque somos cinco medios de comunicación, con menos de 50 trabajadores cada uno, un medio que se transformó en ícono cultural de la ciudad y la provincia. Somos la empresa de comunicación con más producción local, y basados sus contenidos en los conocimientos de la Universidad Nacional le damos lugar a otros medios y como Radio Nacional fomentamos la pluralidad de voces”, amplió Pedrosa.
La historia de los SRT
En 1958 comienza a transmitir Radio Universidad, Desde el dial 580 de AM, y a poco de andar, LW1 se convirtió en una de las emisoras de mayor audiencia en el centro del país.
En mayo de 1962 inicia sus transmisiones Canal 10, la señal de televisión abierta.
Así comenzó a tomar forma el multimedio universitario, sumándose después la FM 102.3, el Canal U y el portal digital de noticias Cba24N.
Su plantilla de personal está compuesta aproximadamente por 240 trabajadores y trabajadoras, entre planta permanente, contratos a plazo fijo y eventuales y otras prestaciones adicionales.
Los intentos privatizadores ya estuvieron durante la década del 90, cuando ocupaba la presidencia Carlos Menem. Por esos años, el Consejo Superior se pronunció por la continuidad del medio en su órbita. Hoy la empresa es una sociedad anónima, con una mayoría accionaria de la UNC (99,50%) y la participación de la Municipalidad de Bell Ville con un 0,50%.